Completada la primera vuelta y, sorprendentemente dada la situación epidemiológica de la Comunidad, sin ningún partido aplazado, toca hacer balance de lo sucedido y, quizás, aventurar también lo que estuviera por suceder, tarea ésta bastante más complicada y plagada de riesgos... puesto que esto es fútbol y no matemáticas.
La lucha por el ascenso parece centrada (pronóstico al cierre de la primera vuelta, pero susceptible de variar de aquí a cuatro o cinco jornadas) en no más de siete equipos, los que van del líder Solares (35 puntos) al Barquereño (27 puntos). Los de Medio Cudeyo marcaron un ritmo bastante fuerte en octubre y noviembre, pero su lujosa participación en la Copa del Rey parece que les ha podido despistar un poco en el tramo final de competición (una sola victoria en los últimos cinco partidos). Cada vez más cerca sienten la presión de un Revilla que lleva ocho victorias consecutivas, racha que inició precisamente derrotando a los de Diego Santos allá por los primeros días de noviembre. No muy lejos se halla el Gama, el otro equipo que ha conseguido derrotar al líder, cerrando los puestos que ahora mismo darían el ascenso a Tercera División. El resto de candidatos serían el Velarde, que está creciendo claramente en la competición (no pierde desde la jornada 10 y, ojo, este fin de semana se enfrenta, para dar inicio a la segunda vuelta al líder en La Estación), un sorprendente y convertido en clara revelación de la competición San Martín, recién ascendido pero con muy buenos números, y dos de los favoritos a priori para pelear el ascenso, el At. Mineros y el Barquereño, que han mezclado actuaciones destacadas con algún tropiezo inesperado.
A partir de aquí entramos en una zona que mezclaría la indefinición por los objetivos. Quizás algún equipo pueda engancharse aún a la pelea por el ascenso, pero resulta complicado cuando esa meta se halla a nueve o más puntos y, sobre todo, con los citados siete equipos por delante. Tendrían que fallar muchos y hacerlo muy bien ese hipotético candidato.
En esa tesitura se hallan Bezana y Monte (23 puntos), Arenas de Frajanas (22), los de 21 (Rinconeda, Nueva Montaña y Miengo) e, incluso, un Ramales que circula con 20 puntos. Para alguno, o varios, de ellos quizás el objetivo más realista ahora mismo sea librar el descenso porque tiene traza de que van a ser más de los tres iniciales los que se produzcan dada la evolución de los equipos cántabros de la 2ª RFEF. Si, ahora mismo, quizás pudieran estar tranquilos porque esas plazas se hallan relativamente lejanas (el Ayrón sería el primer descendido con 14 puntos) no deben descuidarse porque cuando, desgraciadamente, se certifique el, o los, descensos de los cántabros de la 2ª RFEF, esa distancia se quedaría en nada. Ribamontán con 19 puntos antecede a los, de momento, descolgados Ayrón, Los Ríos y Ampuero (estos dos últimos con apenas 11 puntos). Quizás para los de Vargas aún queda algún atisbo de pelear por la salvación, muy lejana sin embargo se antoja para los de la capital y los del Asón.
Quedan, pues, 17 jornadas apasionantes en las que en cada partido habrá algo en juego y pinta a que la clasificación definitiva no va a acabar de perfilarse hasta cerca del final. Algunos han hecho buenos parciales, tienen parte del trabajo adelantado, pero queda lo más difícil: rematar en los exámenes finales. El primero llega ya este fin de semana porque todos los puntos en todos los campos y contra todos los rivales cuentan. Es lo que tiene una competición en formato de todos contra todos. Suerte.
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